Les recomiendo que vean esta película:
De acuerdo, algunas cosas las van a criticar, les van a parecer inverosímiles, aunque déjenme decirles que cuando Jesucristo toca la vida de una persona, la transforma, a veces de forma muy visible y casi inmediata.
Pero tomemos lo rescatable de la película.
Creo que muchas cosas cambiarían, ya no digo en el mundo, sino en mi pequeño mundo, en mi vida y la vida de los que están alrededor mío, si cada vez que vaya a tomar una decisión, por pequeña que sea, me hiciera esa pregunta:
Y aunque parezca una pregunta retórica, no lo es; porque Él mismo nos ha pedido justo eso:
Dicen que somos el producto de las decisiones que tomamos. Y creo firmemente que esto es verdad; no podemos culpar a nadie de las consecuencias de nuestras propias decisiones.
Escucha esta canción:
Después de disfrutar esta extraordinaria interpretación (siempre me ha gustado muchísimo esta canción, no sólo por su ritmo, que es bastante pegajoso, sino más bien por la letra ¡cuántas verdades!), podemos parafrasear algo de su letra:
En cada una de ellas, ¿me he preguntado qué haría Jesús en mi lugar?... Honestamente, y para mi propia vergüenza, la respuesta es no. A veces, cuando menos lo pienso, ya estoy reaccionando de forma "humana", y no como lo haría Jesús.
Sí, ya sé que en este punto se nos vienen a la mente varias expresiones:
El fallar es humano, perdonar es divino.
Soy ser humano, no Dios.
Jesús pudo hacerlo porque era Dios. Yo no.
No puedo hacerlo, no soy perfecto.
Sin embargo, me gustaría invitarte a que leas [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo], y en él podrás observar cómo es que Dios nos dice: "Haz esto", y si mi respuesta es: "No puedo" o "No sé cómo", Él me dice: "Yo te ayudo" o "Yo te diré cómo".
O sea, no hay pretexto ::
De acuerdo, algunas cosas las van a criticar, les van a parecer inverosímiles, aunque déjenme decirles que cuando Jesucristo toca la vida de una persona, la transforma, a veces de forma muy visible y casi inmediata.
Pero tomemos lo rescatable de la película.
Creo que muchas cosas cambiarían, ya no digo en el mundo, sino en mi pequeño mundo, en mi vida y la vida de los que están alrededor mío, si cada vez que vaya a tomar una decisión, por pequeña que sea, me hiciera esa pregunta:
¿Qué haría Jesús en mi lugar?
Y aunque parezca una pregunta retórica, no lo es; porque Él mismo nos ha pedido justo eso:
Y también el apóstol Pablo nos lo dejó dicho:Juan 13:15 escribió:Yo les he dado el ejemplo, para que ustedes hagan lo mismo.
¿Tú cómo la ves? ¿Qué cambiaría en tu mundo si te esforzaras en preguntarte esto, cada vez que tienes que elegir alguna opción? ¿Crees que harías lo que Jesús haría, o insistirías en hacer las cosas conforme a tu propio criterio?1 Corintios 11:1 escribió:Así que sigan mi ejemplo, como yo sigo el ejemplo de Cristo.
Dicen que somos el producto de las decisiones que tomamos. Y creo firmemente que esto es verdad; no podemos culpar a nadie de las consecuencias de nuestras propias decisiones.
Escucha esta canción:
¿Qué hubiera sido de la vida de José cuando vino a él esta mujer?
Que con muchas rosas y un poco de acción a la cama lo quería meter.
¿Qué hubieras hecho tú? ¿Qué hubiera hecho yo?
Cuando una falda te quiere atrapar, ¿qué haría Cristo en tu lugar?
Cuando es más fácil rendirme que correr ¿qué haría Él en mi lugar?
Yo sé lo que haría Jesús, se comportaría como un hombre de verdad.
¿Qué hubiera sido de la vida de Sansón cuando conoció a esta mujer?
Escogió el cuerpo antes que el corazón, con un paquete más: la traición.
¿Qué hubieras hecho tú? ¿Qué hubiera hecho yo?
Cuando una falda te quiere atrapar, ¿qué haría Cristo en tu lugar?
Cuando es más fácil rendirme que correr ¿qué haría Él en mi lugar?
Yo sé lo que haría Jesús, se comportaría como un hombre de verdad.
Como un hombre de verdad...
Deja de pensar en tu sagacidad, deja de creer que eres un Supermán
Con fuego no se juega, ¡no te vayas a quemar! ¡No, no, no, no...!
¡No te vayas a quemar! ¡No, no, no, no, no...!
Cuando una falda te quiere atrapar, ¿qué haría Cristo en tu lugar?
Cuando es más fácil rendirme que correr ¿qué haría Él en mi lugar?
Yo sé lo que haría Jesús, se comportaría como un hombre de verdad.
Yo sé cómo se comportaría Él, ¡como un hombre de verdad!
Yo sé cómo se comportaría ¡como un hombre de verdad!
¿Qué harías tú?
- ¿Qué respondes cuando alguien te ofrece conseguir ilícitamente un préstamo para comprar otra casa?
- ¿Qué haces cuando te están multando por una cantidad exorbitante, y el policía de tránsito te dice que sólo con una mínima cantidad de soborno no te pone la multa?
- ¿Cómo reaccionas cuando te enteras de que alguien ha hablado muy mal de ti a tus espaldas?
- ¿Cuál es tu actitud ante alguien que no te cae bien?
- ¿En qué estado de ánimo vas con tu vecino que estaciona una y otra vez su carro bajo la sombra del árbol que tú sembraste y se encuentra en tu espacio?
- ¿Cómo te diriges a la persona que, estando tú en la fila por una hora, llega directo a pagar, porque conoce a la cajera?
En cada una de ellas, ¿me he preguntado qué haría Jesús en mi lugar?... Honestamente, y para mi propia vergüenza, la respuesta es no. A veces, cuando menos lo pienso, ya estoy reaccionando de forma "humana", y no como lo haría Jesús.
Sí, ya sé que en este punto se nos vienen a la mente varias expresiones:
El fallar es humano, perdonar es divino.
Soy ser humano, no Dios.
Jesús pudo hacerlo porque era Dios. Yo no.
No puedo hacerlo, no soy perfecto.
Sin embargo, me gustaría invitarte a que leas [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo], y en él podrás observar cómo es que Dios nos dice: "Haz esto", y si mi respuesta es: "No puedo" o "No sé cómo", Él me dice: "Yo te ayudo" o "Yo te diré cómo".
O sea, no hay pretexto ::